Es muy posible que las principales dificultades que habitualmente tenemos para conducir una clase o un grupo determinado surgen del desconocimiento del grupo de quienes son aquellos que los integran. El conocimiento de cada una de las partes y del todo que nace de un buen diagnóstico pedagógico permite tener la información que será la base para construir estrategias puntuales que podrán salvar todas las dificultades.
Una clase debe ser pensada como un producto a medida, para un cliente (sujeto de aprendizaje o comunidad) que son únicos e irrepetibles. Las consignas serán los disparadores de conflictos cognitivos que permitirán construir, deconstruir para construir nuevamente conocimientos más sólidos
El desarrollo del pensamiento requiere de un diagnóstico permanente que guíe el acompañamiento del proceso de enseñanza y aprendizaje ayudando al estudiante a aprender a ser capaz de ser..
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